Fue el momento de reponer fuerzas, para ello los valientes guerreros asistieron al punto designado para partir junto a Rabas al club de la unión, donde además de ser tratados muy bien, y degustar unas “heladas” caídas del cielo, todos degustaron de un delicioso cebiche de pescado y una menestra respondona.
Hasta aquí llegó el liderato de los veteranos rebeldes, estos se encargaron de dar las últimas instrucciones a nuestros héroes, organizar la logística, y dejaron el Halcón en manos de Holger Wan Kenobi, quien se adaptó fácilmente al estilo de pilotaje necesario para sobrevivir en el reino de los monos. Supuestamente no tomaría mas de 15 minutos llegar a las barracas y continuar con la misión, pero la vida te da sorpresas.
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